Situado en un eje importante de la ciudad de Lyon que une el centro administrativo con el histórico, el edificio plantea la convivencia de varios usos: colegio de abogados, escuela de abogados y edificio de oficinas que se expresan en fachada. El proyecto rehúye la opacidad de algunas sedes oficiales y apuesta por la transparencia de sus actividades con la convicción de una cierta condición política y democrática de la arquitectura. Un edificio privado pero de carácter público e institucional que muestra sus circulaciones, su división programática horizontal y que se hace accesible y poroso desde el espacio público.
Grandes piezas de vidrio gris, alternan en escala y posición con piezas de piedra filita que permiten la integración de las aperturas. La arquitectura se muestra sólida o transparente, ligera tectónica en función de las condiciones de la luz.