Residencia en Burjassot

Peñín Arquitectos: Alberto Peñín, Pablo Peñín 

Miquel Planas Roselló (Escultor)

Alejandro Marqués, GIA S.L. (Ingeniero Estructuras)

Juan Llobell, I. Alonso, VALNU S.L. (Instalaciones)

Sergio Morant, arquitecto

El proyecto arranca con la selección del solar, por su ubicación y sus características urbanas y topográficas para erigir un esquema en claustro abierto hacia la buena orientación y abrazado en U por el cuerpo de habitaciones. El gradiente de la ciudad a la residencia se inicia en la plaza de acceso creada por la entrada y culmina en la sorpresa de un gran jardín. La presencia de la luz natural, la disposición de las habitaciones, el movimiento de los residentes o el tratamiento de las áreas comunes, capilla y jardín son las apuestas del proyecto concebido para el bienestar de sus usuarios.

El nivel del jardín se emplea para todas las áreas comunes en torno a la tipología del claustro que da acceso a otros espacios como el patio privado de las religiosas o la propia capilla que continua en esta secuencia de lo público a lo íntimo en una rampa descendente que conduce desde la calle hasta el patio privado intuido a través del retablo del altar. La presencia de distintos tipos de luces, la colaboración con el mundo del arte y el cuidado por el detalle persiguen la creación de una atmósfera particular.

El proyecto enuncia varias dualidades, desde la coexistencia de la densidad con el vacío, hasta lo público con lo privado, hasta lo figurativo con lo abstracto todo ello desde el objetivo de dignificar los edificios asistenciales y socializar la arquitectura contemporánea todo ello a través de la atención por el detalle, y lo pequeño versus el exceso de lo icónico y lo conceptual.

La pequeña manipulación de determinadas costumbres constructivas permite ciertos logros estructurales con un precio razonable. La fusión de estructura y membrana ofrecen un buen comportamiento energético que utiliza el patio y las ventilaciones naturales como reguladores climáticos.